sábado, 28 de mayo de 2011

Unidad Didáctica Federico García Lorca

La Unidad Didáctica, que he escogido es sobre Federico García Lorca, un poeta, dramaturgo, y prosista español, también conocido por su destreza en muchas otras artes. Adscrito a llamada Generación del 27, es el poeta de mayor influencia y popularidad de la literatura del siglo XX.

Durante mi periodo de prácticas pude observar que los alumnos de Sexto de Primaria, ya le conocían y sabían algunas obras. Por lo que decidí realizar la Unidad Didáctica sobre este autor.

Los objetivos que se pretenden alcanzar con esta unidad son los siguientes:

- Acercar los estudiantes a la figura de Lorca por medio de su vida y su obra.
- Fomentar el gusto por la poesía, la música y el teatro.
- Utilizar la expresión artística como fuente de comunicación.
- Desarrollar estrategias de compresión y memorización léxicas.
- Fomentar la creatividad plástica y literaria.
- Valorar la importancia de la pronunciación, el ritmo y la entonación en la expresión oral.
- Conocer, comprender y leer parte de la obra poética de Lorca adaptada a la edad de cada alumno.
- Apreciar y valorar la calidad poética de Lorca y disfrutar con el recitado e interpretación de algunos textos escogidos.
- Producir sencillos textos emulando otros muy conocidos del autor.

Si queréis que os envié la Unidad Didáctica, me podéis escribir un comentario o un correo y se os enviara.

Traductor, ¿traidor?

Las paredes de la Biblioteca Nacional de España acogieron anoche, con la colaboración del Ministerio de Cultura, el coloquio entre Mauro Armiño, Premio Nacional 2010 a la mejor Traducción, y Adan Kovacsics, Premio Nacional a la Obra de un traductor.

En el encuentro entre los galardonados y los asistentes, se debatió la teoría de la traducción, tal como se entiende actualmente, y las dificultades de trasmitir un texto desde su lenguaje original a otras lenguas. Ambos han coincidido en que la traducción responde a multitud de problemas lingüísticos, epistemológicos y de género literario (poesía, narrativa o teatro).

Adan Kovacsics, autor de traducciones de clásicos alemanes de los siglos XIX y XX de la Filosofía, incidió en el mal trato cultural a la que está expuesta la traducción en el mundo de las artes, ya que, según él, "en muchas de las fichas técnicas de los libros se ve el título, la editorial, el número de páginas, año de publicación, pero nunca el traductor". Y recordó que el traductor no es un intermediario que tergiversa una obra original para ofrecer una versión posible en un idioma diferente, porque "no atiende ni a gustos ni a preferencias, al igual que no hay ninguna clase de interpretación subjetiva ni pulsaciones emocionales que afecten al significado del texto", apuntó. Defiende con ímpetu su profesión, a la que define como un bien indispensable de la cultura universal. "Gracias a nosotros la literatura se comunica con los corazones de los lectores, enriquecemos la obra original mediante la aportación que le otorga la lengua que yo le doy", ha manifestado.

Por el contrario, Mauro Armiño autor de la versión completa de 'A la busca del tiempo perdido' de Marcel Proust, ha defendido que para comprender un texto en su plenitud hay que ser capaz de impregnarse con su significado. "Primero hay que comprender y después interpretar". Especializado en la traducción de poesía, ha señalado que "los grandes poetas respiran su propio lenguaje", y que son especialmente complicados de traducir, porque "en un poema hay que respetar los puntos y las comas aunque no atiendan a concordancias sintácticas". Y "es que el traductor de poesía, además de políglota, es necesariamente un poeta". Es partidario del empleo de un lenguaje llano y sencillo, pero que respete la autonomía del texto. Ha criticado con acritud a autores de la talla de Azorín, uno de los estandartes literarios de la Generación del 98, por su estrambótico uso del idioma. "Es un gran escritor que nadie lee porque exige al lector tener un diccionario en la mano, debido a las rebuscadas palabras que utiliza".

En ocasiones, las relaciones entre un escritor y un traductor son conflictivas por la arrogancia de algunos escritores que desdeñan la labor del traductor al considerarla un género menor. Y, sin embargo, traductores han sido escritores como Vladimir Nabokov, José Bianco, Alberto Guirri y Octavio Paz. Este último afirmó que "por una parte, la traducción suprime las diferencias entre una lengua y otra, mientras por otra las revela más plenamente".

Mauro Armiño y Adan Kovacsics han admitido que "es verdad que hay escritores un poco especiales que nos dificultan nuestra labor; preferimos traducir sin interferencias de los autores". Armiño añadió una excepción: Pierre Klossowski, filósofo francés fallecido en 2001, que "era un genio muy divertido y cercano", al que le tradujo 'Tan funesto deseo'. Y es que estos escritores en la sombra dan vida a la literatura y al castellano.

http://www.elmundo.es/elmundo/2011/05/27/cultura/1306483298.html

jueves, 19 de mayo de 2011

Un cero en oratoria

Con independencia de saberse la lección o no, cuando a un adolescente le llaman a la pizarra le embarga el pavor escénico. Es más que habitual que el reo esquive entonces la mirada, juegue con el boli, cruce los brazos, se atuse el pelo nerviosamente y no encuentre las palabras adecuadas para hacerse entender, sea gritando o para el cuello de su camisa. Veredicto: un cero en oratoria. La mayoría de los españoles -de la quema no se salvan tampoco los adultos- no controla ninguno de los tres tipos de lenguaje: verbal (palabra), gestual o paraverbal (voz). Cuesta hasta levantar la mano para preguntar en clase. "Nos puede el sentido del ridículo y no hay que tenerlo. Hablar es algo natural y hacerlo delante de mucha gente no cambia las cosas", asegura la periodista Mónica Pérez de las Heras, que imparte cursos a profesionales. "No gestionamos bien el lenguaje, delegamos en el subconsciente. Decimos una cosa de palabra pero, a lo mejor, lo contrario con los gestos", prosigue.

"Hay que aprender a controlar la inteligencia emocional desde pequeños. Por ejemplo, en la guardería, trabajando la empatía. En Estados Unidos, a los 11 años los niños exponen en clase, debaten y cuando llegan a la Universidad ya están preparados", sostiene Pérez de las Heras, autora de ¿Estás comunicando? y El secreto de Obama. "Los niños ven como un castigo salir a la pizarra y, por eso, para habituarles, deberían de explicarse delante de ella desde los tres años", añade Miguel Gómez-Aleixandre, profesor del club de debate del CEU-San Pablo. Manuel Sánchez-Puelles, ganador de varios concursos hablados, también apuesta por la edad temprana: "Los niños no tienen vergüenza y hay que aprovechar ese momento para que expresarse en público les parezca una cosa natural".

En Italia y Francia abundan los exámenes orales en secundaria y pasan una prueba en Selectividad. En España, a partir del próximo año, existirá un examen oral en lengua extranjera para acceder a la Universidad, mientras los Gobiernos autonómos planean organizar campeonatos de debate. Tímidamente empiezan a celebrarse también en colegios, como el Balder (Las Rozas, Madrid) cuyos alumnos de 5º y 6º de primaria compitieron en su octava edición con tres escuelas. El tema a discutir: ¿reciclamos todo lo que necesita nuestro medioambiente? Cada equipo lo formaba un capitán, un documentalista y tres oradores.
"Una cosa es repetir como un papagayo lo que has aprendido en un examen y otra convencer al público construyendo un discurso que se va cambiando si se necesita", diferencia Adolfo Lucas, coordinador de las mesas de debate en la Universidad Abat Oliba CEU y autor de El poder de la palabra. "Desde el momento en el que el niño tiene una base de lectura y escritura, cuando uno es capaz de expresarse, debe aprender persuasión".


Oratoria no es una asignatura obligatoria en las universidades españolas, "pero lo será a medio plazo porque Bolonia impulsa estas habilidades y capacidades", asegura Gómez-Aleixandre, coordinador del campeonato Inter CEU. Cada vez más universidades ofrecen clases complementarias. Entre esa red también se organizan torneos en los que se enfrentan conjuntos de dos a seis personas. "Te proponen dos temas y tienes 20 días para preparar la postura a favor y en contra. Un minuto antes, te enteras de qué vas a debatir y en qué lado estás", cuenta Sánchez-Puelles.

Este licenciado en Derecho y Ciencias Políticas venció en pareja el torneo Pasarela y le llovieron las ofertas de trabajo. Por algo lo patrocinan las grandes consultoras y los despachos de abogados, que encuentran un excelente nicho de nuevos empleados entre sus 120 participantes. "Tuvimos que prepararnos dos preguntas: ¿debe haber un tope en la retribución a los grandes directivos? y ¿beneficia a la educación española el plan Bolonia? Creo que les convenció la falta de miedo al exponer y el conocimiento profundo del tema", concluye.

Al menos, los resultados del estudio europeo Reflex sobre competencias de los egresados demuestran que los españoles son conscientes de su incapacidad "de presentar en público productos, ideas o documentos". Se califican con un 4,7. Tan solo se reconocen peores en idiomas.

http://www.elpais.com/articulo/educacion/cero/oratoria/elpepusocedu/20110516elpepiedu_1/Tes

lunes, 9 de mayo de 2011

Relámpagos para merendar

"Salamanca le da de comer a mis hijos. Y los cuentos les dan de merendar". Para Miguel de Unamuno, icono del intelectual vehemente y melancólico, el relato corto fue una importante fuente de ingresos y también un terreno para medir su pulso literario. Padre de nueve hijos, justificaba así el asunto práctico: "Si por un cuento te dan cinco, seis u ocho duros, libres de gastos, ten por seguro que una novela 20 veces más extensa que él no te daría 100, 120 o 160 duros".


Pero más allá de las cuentas domésticas del viejo rector, los relatos fueron uno de sus más importantes campos de experimentación. "En los cuentos de Unamuno están todas sus ideas, la génesis de posteriores desarrollos, los núcleos del resto de su obra", explica Óscar Carrascosa Tinoco, encargado de la edición de cuentos completos que ahora publica Páginas de Espuma. Ochenta y siete relatos que suponen la mayor recopilación hecha hasta la fecha de su obra breve. "En definitiva", añade Carrascosa, "en los cuentos de Unamuno está todo Unamuno, su heterodoxia, todo su asistematismo, que llena de perlas sus relatos, y también toda su coherencia de pensamiento".


"Hasta ahora ninguna edición había recogido tantos", asegura el encargado de este libro que incluye relatos que a veces no superan las dos páginas y llevan títulos como Ver con los ojos, El héroe, ¿Por qué ser así?, El desquite, El que se enterró, Un cuentecillo sin argumento o Carbón, carbón. Eso sí, Carrascosa advierte: "La prudencia investigadora nos obliga a decir que podría aparecer alguno más en el futuro, pero a día de hoy es la primera vez que se reúnen todos". Entre los relatos, algunos (¡El amor es inmortal!) jamás se habían editado antes. "Este relato se publicó originalmente en la revista venezolana El Cojo Ilustrado el 1 de julio de 1901. Pero lo curioso es que 20 años después, Unamuno incluyó este relato en el capítulo VII de La tía Tula. Él solía decir que escribía a la que salga, pero no era verdad".


Unamuno publicó cuentos a lo largo de toda su vida en revistas y periódicos. En ellos ofrecía claves de su personalidad y de su pensamiento. La concisión del estilo, sus eternas preocupaciones filosóficas y la sátira social. "Era malhumorado, pero tenía humor, de ahí la bufotragedia, que está tan presente en sus cuentos como la meditatio mortis o la obsesión por la inmortalidad, la suya, claro", señala Carrascosa.


La publicación de los cuentos completos se suman a la serie de conferencias realizadas el pasado mes en la Fundación Juan March de Madrid por Jon Juaristi, que ultima una biografía sobre el autor de San Manuel Bueno Mártir y que desgranó durante tres jornadas la fascinante peripecia vital de este hombre que nació en Bilbao en 1868 y murió en Salamanca a finales de 1936, hace ahora 75 años. La última de las tres conferencias se centró en los meses finales del escritor (recogidos en el estremecedor Agonizar en Salamanca, el libro de Luciano G. Egido editado en 2006 por Tusquets) y que constituyen uno de esos puntos sin retorno en la historia de España. Unamuno -"aquella roca de resistencia y de rebeldía", señala G. Egido- moría acosado por ambos bandos y, como dijo Ortega, por causa del "mal de España". Un mal que Juaristi empieza a detectar cuando años antes, en su destierro a la isla de Fuerteventura por sus críticas a la dictadura de Primo de Rivera, Unamuno, que esperó sin éxito el apoyo de las masas ("y obviamente no se movió nadie"), empieza a cuestionar su rol histórico: "Llega a Fuerteventura y el pueblo español no chista. Y él empieza a tener serias dudas sobre su papel en la vida española. Si se habrá equivocado al representar un papel político que se aleja de su verdadera función: agitador de espíritus a través del pensamiento y la literatura".


Aunque el latigazo mortal le llegaría después de famoso enfrentamiento a Millán Astray en la Universidad de Salamanca, sobre cuyas consecuencias hablaría en estos términos antes de morirse: "Estoy desesperado. ¿Usted piensa sin duda que los españoles luchan y se matan, queman las iglesias o dicen misas, agitan la bandera roja o el estandarte de Cristo porque creen en algo? ¡No! ¡No! Escuche bien, ponga atención en lo que voy a decirle. Todo esto sucede porque los españoles no creen en nada. ¡En nada! ¡En nada! Están desesperados. Ningún otro idioma del mundo posee esta palabra. El desesperado es el que ha perdido toda esperanza, el que ya no cree en nada y que, privado de la fe, es presa de la rabia".


"Hay que empezar a ver a Unamuno como una de las claves de la modernidad", señala Carrascosa. "Y sus cuentos son una llave para entender de verdad la crisis de la modernidad. La crisis de Unamuno es el epítome de la crisis moderna. Y es ahí donde se entiende su grandeza y desde ahí se establece su canon. Representa la gran figura del intelectual inconformista con todo, con el poder y consigo mismo, que por desgracia hoy se ha perdido".


Poética de lo breve


- Para el narrador, filósofo y poeta Miguel de Unamuno no existían las fronteras entre los distintos géneros literarios. Todos ellos le sirven para expresar una misma problemática intelectual:


- "Sí, tus obras mismas, a pesar de su aparente variedad, y que unas sean novelas, otras comentarios, otras ensayos sueltos, otras poesías, no son, si bien fijas, más que un solo y mismo pensamiento fundamental que va desarrollándose en múltiples formas".


- "El escritor que hoy quiere ser leído, lo repito, ha de saber fabricar píldoras, extractos, quintaesencias. La cuestión estriba en hacerlo de modo que sean agradables de tomar; en saber dorarlas".


- "Son, pues, no pocos cuentos novelas abortadas, con lo que a menudo ganan. Pero otras veces pierden. Y así un cuento que sea más que un núcleo de novelas, como cuento es imperfecto, como imperfecta es la novela que no sea más que un estiramiento de un cuento".


viernes, 29 de abril de 2011

'Teddy' Bautista: 'Internet salvará la cultura'


El presidente de la Sociedad General de Autores y Editores (SGAE), Eduardo Bautista, ha afirmado que "lo que va a salvar Internet es la cultura", durante su intervención en un coloquio en Madrid de la Fundación Euroamérica.



En opinión de Bautista, los nuevos fenómenos tecnológicos adquieren mayor valor gracias a las creaciones artísticas, tanto materiales como intangibles. "Su valor es de tal magnitud que no se pueden plantear nuevos modelos de negocio sin tener en cuenta este factor", ha dicho.



El presidente de la SGAE ha pedido que "trabajemos para que las redes sociales sean el mejor medio de compartir experiencias trascendentales", así como en un nuevo modelo de sociedad para el consumo de productos culturales, en el que se fijen unas reglas de juego que favorezcan el respeto y el desarrollo de la creación.


Bautista, que ha pedido que la cultura no se convierta en un arma arrojadiza entre partidos políticos, sino en una herramienta de consenso, ha destacado asimismo la "extraordinaria fuerza" del castellano como vehículo del lenguaje, "que debemos aprovechar para fortalecer la marca España en el exterior".


Al acto, organizado por la Fundación Euroamérica, también han asistido, entre otros, Enrique Cerezo, presidente de EGEDA; Juan Cruz, director adjunto a la dirección del diario El País, y el músico y productor Alejo Stivel.


La Fundación Euroamérica, con sede en Madrid, es una organización sin ánimo de lucro y financiada por empresas que tienen inversiones en América, así como la AECID y el ICEX, con el objetivo de fomentar las relaciones entre Europa y América, especialmente desde el sector privado.




miércoles, 27 de abril de 2011

Nuestros críticos nos dan la Noche

La Fiesta de los Libros ya ha comenzado con la entrega del Premio Cervantes a Ana María Matute en Alcalá de Henares. Por la tarde, Madrid reventará de pura literatura con más de quinientas actividades (lecturas, presentaciones, conferencias, firmas, debates, ginkanas literarias) en 138 espacios. Este año, además, el lema es “Regala un libro”, y eso es lo que ahora mismo están haciendo los críticos literarios de El Cultural: regalar a nuestros lectores más enredados y cómplices sus títulos favoritos, clásicos y novedades, apuestas seguras para toda estación.


ÁNGEL BASANTA- Blanco nocturno, de Ricardo Piglia (Anagrama). Ha ganado el Premio de la Crítica este año. Es una novela excelente para lectores de todas las exigencias.- Los enamoramientos, de Javier Marías (Alfaguara). Otra gran novela del escritor español con mayor proyección internacional en las más altas esferas literarias.- Cabalo de ouros, de Víctor Freixanes (Galaxia). Escrita en lengua gallega, marca la vuelta del autor a la novela tras 17 años de silencio. Quienes puedan leerla en gallego (aún no hay traducción al castellano) no se arrepentirán.


ERNESTO CALABUIG- Chesil Beach, de Ian McEwan (Anagrama), que me parece una historia sobria, tremenda y dolorosa acerca de la imposibilidad de un amor por condicionamientos y trabas externos, un tema que está tan presente en otra de las grandes cimas de McEwan, Expiación.- De qué hablo cuando hablo de correr, de Haruki Murakami (Tusquets), que puede parecer, engañosamente, que trata sólo de la relación del escritor con su afición a preparar y correr maratones, pero que en realidad expone toda una teoría acerca de cómo vive y escribe y, sobre todo, habla de su modo de negociar con las limitaciones que padece todo ser humano.


PILAR CASTRO- Blanco nocturno, de Ricardo Piglia (Anagrama). Me parece genial, porque lo disfrutarán lectores de muy distinto signo.- El maestro y Margarita, de Mijaíl Bugákov (Alianza). Una novela brillante, clave para conocer y disfrutar a un imprescindible de la lireratura rusa del siglo XX.- Ensayo sobre la ceguera, de José Saramago (Alfaguara). Un favorito.- Ojos de agua y La playa de los ahogados, de Domingo Villar (Siruela). Dos novelas policíacas con entretenimiento garantizado.


JACINTA CREMADES- El Mundo de ayer. Memorias de un europeo, de Stefan Zweig (Acantilado). La única autobiografía que se conoce del autor austriaco, relata el cambio que vivió Europa a partir de la Primera Guerra Mundial. El libro, cargado de nostalgia, es de una gran belleza. Su estilo es más profundo, más determinante y perfecto, si cabe, que en sus demás novelas.- El cuarto de atrás, de Carmen Martín Gaite (Áncora y Delfín). Novela en la que la escritora española reconstruye un pásado íntimo a través de los recuerdos y de la memoria. Fue Premio Nacional de Literatura en 1978 y, para mí, es una de las novelas esenciales de su autora. - Mi hermana vive sobre la repisa de la chimenea, de Annabel Pitcher (Siruela). Es la primera novela de esta escritora inglesa de apenas 28 años. El tema es trágico pero contado con tanta ternura y humor que no he dejado de recomendarlo desde que lo he leído.


FRANCISCO DÍAZ DE CASTRO- Caligrafía de los sueños, de Juan Marsé (Lumen). Una novela del mejor y más depurado Juan Marsé.- Sueño del origen, de Eloy Sánchez Rosillo (Tusquets). Poemas de afirmación existencial, hímnicos y trascendentes.- Un invierno propio, de Luis García Montero (Visor). La escritura más intensa e imaginativa de un poeta que desvela la esencial unidad de lo colectivo y lo íntimo.


MANUEL HIDALGO- Valor de Ley, de Charles Portis (Debolsillo). No importa en absoluto haber visto la estupenda película de los Hermanos Coen. Al contrario. La novela de Charles Portis es una maravilla, por su frescura, fuerza y minuciosidad en las descripciones. Quien no la conozca va a descubrir un gran libro y a un gran autor, del que, sin duda, querrá leer más.- Martirologio (Diarios), de Andréi Tarkovski (Sígueme) Son los diarios del director de Solaris y Stalker, desde 1970 hasta su muerte en 1986: su forma de concebir el cine, el terrible esfuerzo y exigencia que le supuso sacar adelante sus películas, sus juicios (con frecuencia severos) sobre los filmes de otros cineastas, el acoso político y económico al que fue sometido, su crónica falta de dinero para rodar y para vivir, su lucha contra el desánimo y las enfermedades...


CLARA JANÉS- Leve sangre, de Jeannette L.Clariond (Pre-Textos 2011). Mi breve comentario: Su autora es mejicana. Es el libro de poesia escrita en lengua española mas profundo, hermoso y enigmatico que he leido este año.- El bosque dividido en islas pocas, de Jenaro Talens (Círculo de lectores, Galaxia Gutemberg, 2009). Es apabullante leer de un tirón la poesía reunida de Jenaro Talens, un puntal de nuestras letras. El pensamiento se hace melodia con tanta naturalidad en su obra que casi no te das cuenta.


JOSÉ MARÍA NADAL SUAU - Teatro, de Don DeLillo (Seix Barral). Porque su autor es uno de los mejores escritores de diálogo de la narrativa contemporánea, y en este libro entendemos por qué. - Crítica de la inteligencia alemana, de Hugo Ball (Capitán Swing). Porque es uno de los ensayos más potentes que he leído.- Nueva York, de Pier Paolo Passolini (Errata Naturae). Porque, aunque el título sea levemente engañoso, recupera la voz de un hombre que era más interesante que su ideología, y que supo entender, por encima de inevitables prejuicios, esa ciudad y la lucha constante que en ella se vive."


JAVIER PÉREZ DE ALBÉNIZ- Hollywood Moon, de Joseph Wambaugh (Mosaico). Una novela sorprendente basada en anécdotas vividas por las patrullas de la policía de Los Angeles. Se cruzan las tramas y los personajes de manera precisa, emocionante, inolvidable. La mejor novela negra en años.- Blues. La música del Delta del Mississippi, de Ted Gioia (Turner). Todos los aficionados al rock en particular, y a la música en general, deberían leer esta historia. Son las raíces, y ayudan a entender de dónde viene todo lo que escuchamos...- Un naturalista y otras bestias, de George B Schaller (Altair). El zoólogo de campo más importante del mundo es también un excelente escritor. En este libro, dividido en 20 capítulos, cuenta otros tantos viajes realizados para estudiar algunas de las especies animales excepcionales.


LUIS RIBOT, recomiendo tres buenos para estimular el gusto por la lectura:- Tocar los libros, de Jesús Marchamalo (Fórcola). Es un librito que se lee pronto, en el que el autor analiza la belleza del libro tradicional en papel, el placer de su lectura y su conservación, la complicidad que se crea con ellos, los libros favoritos de cada uno..., todo ello sazonado con numerosos detalles sobre lectores y bibliotecas.- El baile, de Irene Némirovski (Salamandra). Bellísimo pese a su brevedad. Aquí la autora, muerta en Auschwitz como consecuencia de la barbarie nazi, da en pocas páginas muestra de su enorme talento, lamentablemente truncado de forma prematura.- Mi familia y otros animales, de George Durrell (Alianza). Una obra más extensa y clásica que narra la infancia familiar y el amor a la naturaleza que llegó a desarrollar su autor en la isla griega de Corfú. Un libro divertido y ameno.


Para lectores más avanzados:- El año de la muerte de Ricardo Reis, de José Saramago (Alfaguara), que él mismo -según me confesó en una ocasión- consideraba su mejor obra. Un retrato maravilloso del alma, el paisaje y las gentes de Lisboa.- Por último y para quien no le conozca, yo recomendaría un autor: Josep Pla, cuyas muchas obras pueden leerse en catalán o en español. Pla es un novelista y narrador de la altura de un Baroja o un Azorin, cuyos textos, basados en su mayor parte en la descripción de la vida diaria de su mundo catalán, suponen un remanso de paz y de belleza para el lector.


OCTAVIO RUIZ-MANJÓN- Si esto es un hombre, de Primo Levi. (Muchnik), los recuerdos del escritor sobre su estancia en Auschwitz, para que se comprenda lo que significó el Holocausto y el respeto con el que se debe utilizar esa palabra.- Palabras como puños, coordinado por Fernando Rey (P,Tecnos), para que se entienda cómo la intolerancia política hizo imposible la convivencia democrática en la segunda República española.- Jesús de Nazaret (Encuentro, Madrid), el reciente libro de Benedicto XVI, para elevar un poco el espíritu frente a la amenaza de los totalitarios, enemigos de la libertad personal, y los desvergonzados oportunistas que les hacen el juego.


A. SÁENZ DE ZAITEGUI - El juramento de la pista de frontón, de John Ashbery (Calambur). Una de las obras maestras de la literatura del siglo XX, de la mano de una leyenda viva de la poesía norteamericana contemporánea, en una completísima edición a cargo de Julio Mas Alcaraz. Un clásico inagotable, pura energía.- Escenas de la catástrofe, de Toni Montesinos (Polibea). Nueva York vista a través de los ojos del poeta. Y no, esto no es Lorca. Más de allá del costumbrismo, se lee como libro de viajes, pero también como ficción de ficciones: la literatura, el cine, el arte. Exquisitamente editado. - La parte por el todo: Antología poética 1998-2011, de José María Cumbreño (La Isla de Siltolá). Inteligente, ingenioso, distinto. Se lee con tanto interés y curiosidad que las páginas se pasan solas. Por subversivos y verdaderos, sus epigramas son difíciles de olvidar. Poesía para quien piensa de otra manera.


RICARDO SENABRE- El dia de mañana, de I. Martínez de Pisón (Seix Barral). Excelente novela en que se repasa medio siglo de vida española sin reducir la historia a pura anécdota doméstica. - Las cartas que debía, de Rafael Soler Medem (Vitruvio). Poesía honda, magníficamente escrita, que actualiza algunos temas eternos, como el amor o el paso del tiempo. - Novelas en tres líneas, de Félix Fénéon (Impedimenta). Ningún periodista debería dejar de leer estos modelos de concisión expresiva y precisión conceptual, que logran condensar en un brevísimo espacio historias complejas.


LOURDES VENTURA- Historia de las alcobas, de Michelle Perrot (Siruela). El nacimiento, el reposo, el amor la muerte: con talento, la historiadora francesa abre las puertas de los rincones de la intimidad donde transcurren muchos hitos de la existencia humana.- Indian Express, de Pepa Roma (Planeta, Premio Azorín). La escritora que nos fascinó con Mandala vuelve a la novela con una mirada penetrante sobre un complicado viaje a la India de dos amigas. En un ejercicio analítico implacable se nos muestra la evolución de las utopías viajeras y el deterioro de una amistad.- La luna de Artemisa. Aventuras y desventuras de una pintora del siglo XVII, de Ara de Haro (Ediciones Fuente de la Fama). Un exquisito bocado literario para conocer en profundidad a la pintora barroca Artemisia Gentileschi, seguidora de Caravaggio. Un texto poético, fiel a la historia y lleno de conocimientos estéticos y humanos.


DARÍO VILLANUEVA- Nueva York, de Pier Paolo Passolini (Errata Naturae). La ciudad mítica visitada por un escritor italiano poco antes de su muerte. Un relato desenfadado de aquella experiencia suya, con ribetes del malditismo del autor y los aires abiertos de los años sesenta, junto a una entrevista perdida donde Pasolini habla sin pelos en la lengua.- Obras Literarias en castellano, 1 y 2, de Álvaro Cunqueiro (Biblioteca Castro). El deslumbramiento de la narrativa, teatro y poesía de un escritor incomparable, ahora en una segunda edición muy bien presentada por Miguel González Somovilla.- Casi la voz, antología personal (1960-2008), de Orlando Rossardi (Aduana Vieja). "Palabras como cosas que se queden tranquilas en su sitio./ Palabras como espadas que calen hondo".


África necesita dos millones de profesores de primaria antes de 2015

Los ministros de Educación de 52 países de África aseguraron que el continente necesita dos millones de profesores de primaria para 2015. Lo hicieron durante una conferencia sectorial celebrada el 13 al 15 de abril en la capital de Togo. El informe final de este encuentro apunta que, "dada la situación actual y sabiendo que el principal desafío para África está en la grave escasez de maestros, se debe contratar a más de dos millones de docentes para el año 2015, para llenar así el vacío existente en educación primaria".


Los participantes señalaron que, más allá del aspecto cuantitativo, la consecución de una educación universal de calidad para todos los africanos requiere inversión en la enseñanza, adaptación a las necesidades individuales, cambios sociales y económicos y especial hincapié en el rendimiento académico.



Los titulares de Educación de los 52 países coincidieron en las condiciones desfavorables en las que viven los maestros (muchos de ellos, en el umbral de la pobreza), que afectan a su rendimiento y motivan una fuga de cerebros hacia otras zonas u otros sectores económicos. En este sentido, se comprometieron a mejorar las condiciones laborales y la gestión del personal, así como su formación.


Esta conferencia panafricana estuvo organizada conjuntamente por la Unión Africana (UA), la UNESCO y UNICEF.